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• “La COVID-19 mata pero las patentes
también bloqueando el acceso con equidad a vacunas y
tratamientos” denuncian desde la campaña Vacunas para
tod@s.
• Del 22 al 30 de noviembre, las entidades del nodo
valenciano de la iniciativa europea Right2Cure
instalarán mesas de recogida de firmas apoyando la
suspensión de patentes en hospitales públicos,
mercadillos y plazas.
• Sindicatos, asociaciones vecinales y ONG valencianas
sumarán fuerzas para exigir que las vacunas,
medicamentos y tecnologías asociadas a la COVID-19 se
consideren bienes públicos globales y se supere el
apartheid de vacunas.
Lugares y fechas de recogida de
firmas
La campaña ‘Vacunas para tod@s’, nodo valenciano de la
iniciativa ciudadana europea Right2cure, formada por más
de 50 organizaciones y asociaciones , denuncia la
posición de la Unión Europea en la Organización Mundial
del Comercio (OMC), que bloquea liberar patentes
relacionadas con la COVID-19, pese a lo acordado en el
Parlamento Europeo.
Los contagios por SARS-CoV-2 vuelven a subir en Europa y
la OMS advierte de que en los próximos meses podrían
morir medio millón de europeos. Ante la próxima reunión
de la OMC, exigen que la UE deje de bloquear la
propuesta de India y Sudáfrica de Liberar Patentes.
La postura de la Comisión Europea impide el acceso
equitativo a las vacunas, prolonga el sufrimiento y
aumenta las muertes causadas por el SARS-COV2. La
próxima reunión de la Conferencia Ministerial de la OMC
se celebrará del 30 de noviembre al 3 de diciembre en
Ginebra y tratará la propuesta presentada en octubre de
2020 por Sudáfrica y la India de suspender las patentes
de productos sanitarios, medicamentos y vacunas
relacionados con pandemia.
Una propuesta apoyada por más de 100 países, incluido el
Vaticano, además de centenares de premios Nobel,
científicos, artistas, y organizaciones de la sociedad
civil. También en tierras valencianas más de 100
personalidades del mundo de la ciencia, la cultura y la
sanidad expresaron que “el interés general y la salud
pública deben estar por encima del lucro de unos pocos”
Frente a la necesidad de aumentar la producción,
diversificar centros de producción y distribución,
reducir precios abusivos y mejorar el acceso a vacunas y
tratamientos, las corporaciones farmacéuticas apelan a
sus derechos de patentes, su singular “patente de corso”
para asegurar unos beneficios escandalosos. Mientras la
UE, Reino Unido, Suiza y, Japón, siguen actuando como
lobistas de la Big-Pharma en lugar de defensores del
derecho a la salud.
Se estima que todavía mueren cada día en el mundo 10.000
personas. La OMS advirtió la semana pasada que Europa
vuelve a estar en el epicentro de la pandemia y “según
proyecciones fiables podríamos tener otro medio millón
de muertes por COVID-19 hasta febrero”.
Si no se extiende la vacunación en el mundo la COVID-19
seguirá golpeando y matando. Mientras la Pandemia esté
lejos de acabar, la población del Sur Global sigue
sufriendo el ‘apartheid’ en vacunas. Por cada primera
dosis de vacuna que se pone hoy en un país de bajos
ingresos, se ponen 6 terceras dosis en países ricos. A
día de hoy, en los países desarrollados, el 70% de la
población ha recibido dos dosis, mientras la pauta
completa en los países de bajos ingresos, llega a menos
del 5%.
Esta inequidad es una catástrofe moral para la humanidad
(Dr. Tedros OMS) y es un riesgo para todas las personas,
porque el virus sigue circulando y matando, y puede
generar nuevas variantes que escapen a la inmunidad
adquirida con las vacunas.
La suspensión de patentes y la transferencia de
tecnología a través de la OMS, que pidieron India y
Sudáfrica hubiera permitido fabricar el doble de dosis
(60 millones diarias, en lugar de 30 millones diarias) y
venderlas a precio de coste, más accesible para todos
los países (1-2 euros / dosis, en lugar de 15-20 euros
/dosis).
De esta forma, el 1 de julio de 2021 se hubiera podido
vacunar al 70% de la población mundial (5.640 millones
de personas) con dos dosis (10.800 millones de dosis).
La circulación del virus se habría cortado. Combinando
la vacunación con las medidas de protección de salud
pública, como mascarillas, distancia social, etc., la
incidencia y la mortalidad habría caído en picado.
SE HUBIERA EVITADO UN MILLÓN DE MUERTES
Se hubiera evitado también la ignominia de no vacunar a
tiempo a millones de personas de países pobres. Y nos
hubiéramos podido vacunar todos con menos de la mitad
del dinero que hemos gastado los países ricos para
vacunarnos sólo nosotros. Eso sí, las empresas
farmacéuticas no hubieran tenido los enormes beneficios
que han logrado con los precios de las vacunas 10 o 15
veces más caros de lo que cuestan.
LA COVID-19 MATA, PERO LAS PATENTES TAMBIÉN
Conscientes que nadie estará a salvo hasta que todos lo
estemos desde la iniciativa consideran una obligación
seguir luchando para que las vacunas, medicamentos y
pruebas diagnósticas se consideren bienes públicos
globales y no productos inaccesibles para la población
más vulnerable del planeta.
Ante un momento muy delicado en la evolución de la
pandemia, el nodo valenciano de la plataforma Right2Cure,
se suma a la semana de acción europea para #LiberarPatentes.
“Llamamos a los valencianos y valencianas a apoyar la
campaña, a sumar sus firmas y a exigir que las vacunas y
los medicamentos no sean un lujo para gran parte de la
población mundial” concluyen.
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