• La laguna principal de Doñana se ha
secado. El Parque Nacional desaparece, siguiendo la
estela de las Tablas de Daimiel. Casi el 60% de las
lagunas que existían en los años 80 en Doñana han
desaparecido actualmente.

• A pesar de las reiteradas denuncias, no se ha hecho
nada y el Gobierno andaluz está a punto de legalizar
2.000 nuevas hectáreas de regadíos.

• Doñana agoniza. Lo que era su zona inundada
permanente, y la más grande, la laguna de Santa Olalla,
se ha secado completamente.
A pesar de ser una laguna que se alimenta por las aguas
subterráneas, nunca antes se había secado dos años
consecutivos 2022-2023, según ha comunicado la Estación
Biológica de Doñana. Para Greenpeace, esto pone en
evidencia el deplorable estado de conservación en que se
encuentra el humedal más protegido del país, fruto de la
sobreexplotación y mala gestión del agua que se hace
fuera de los márgenes del espacio natural protegido.
Tal y como ha alertado Greenpeace en numerosas
ocasiones, estamos ante la crónica de la muerte
anunciada de uno de los humedales más importantes del
mundo. Al igual que lo sucedido en el Parque Nacional de
la Tablas de Daimiel, en Ciudad Real, el Parque Nacional
de Doñana sigue la misma trayectoria e historial hacia
su desecación y desaparición. El crecimiento y
transformación de miles de hectáreas en regadíos
intensivos, unido a las extracciones masivas e ilegales
de agua subterránea, la modificación de canales y cauces
hacia el espacio protegido han llevado a Doñana a una
lenta agonía. Y Doñana sólo es la punta del iceberg de
un problema que afecta a muchos otros lugares del
estado.
A pesar de los intentos y conversaciones entre el sector
agrario y las organizaciones sociales y ecologistas a lo
largo de los años para regular y garantizar la
convivencia entre actividades productivas y la
conservación del humedal, la situación es crítica. Desde
que empezara el boom de la agricultura intensiva
alrededor del espacio protegido, especialmente en el
sector de los frutos rojos, y a pesar del largo proceso
de diálogo que supuso el Plan de la Corona Norte de
Doñana, la superficie de regadíos no ha dejado de crecer
en su entorno; muchos de ellos de forma ilegal. Y lejos
de atajar el problema, la administración andaluza está a
punto de permitir la legalización de cerca de 2.000
hectáreas de regadíos que no tienen derechos para usar
el agua del acuífero.
Los científicos y los colectivos ecologistas no han
dejado de mostrar su preocupación desde hace años por lo
que está sucediendo en Doñana. De hecho el último
estudio presentado por la Estación Biológica de Doñana –
CSIC muestra que casi el 60% de las lagunas que existían
en los años 80 han desaparecido actualmente. El informe
señala cómo las sequías, cada vez más recurrentes y
severas como consecuencia del cambio climático, sumado a
la sobreexplotación de los recursos hídricos
subterráneos, están haciendo desaparecer esta joya de la
biodiversidad.
Este pasado mes de julio, Greenpeace, junto a la actriz
Alba Flores, visitaron Doñana y pudieron comprobar el
grave deterioro del humedal, donde el bajo nivel en sus
lagunas dejaba ya en evidencia las graves consecuencias
de las excesivas extracciones de agua masivas, fruto de
una agricultura de regadío intensivo e industrial
desarrollado al amparo del beneplácito de las
administraciones responsables. Se suma así a las
diferentes actuaciones que la organización ecologista
está haciendo junto a las demás organizaciones que
forman parte de la plataforma Salvemos Doñana que,
también a principios del mes pasado, acudía a Bruselas
para entregar al comisario europeo de medioambiente,
Virginijus Sinkevicius, 260.000 firmas contra la
proposición de Ley impulsada por el partido popular y
Vox en Andalucía.
“Doñana sufre varios problemas para garantizar su
supervivencia, y no solo es la sequía. Desgraciadamente,
y a día de hoy, el más grave de ellos son las decisiones
políticas. Así, el Parque Nacional está en vilo y a la
espera de la aprobación, por parte del Gobierno andaluz,
de una nueva ley que legalice miles de nuevas hectáreas
de regadíos, lo que supondrá la desaparición total de
este enclave de biodiversidad y vida”, ha declarado
Julio Barea responsable de la campaña de aguas de
Greenpeace. |
• © valenciadiario.com
© valenciadiario.es © valenciadiario.eu - 2015-2023 (Todos los derechos
reservados).
• Queda terminantemente prohibida la reproducción total
o parcial de los contenidos ofrecidos a través de esta
Web, salvo autorización expresa de valenciadiario.com, o
de valenciadiario.es.
• Queda prohibida toda reproducción a los efectos del artículo
32,1, párrafo segundo, Ley 23/2006 de la Propiedad
Intelectual.
• Queda prohibida la distribución, puesta a disposición,
comunicación pública y utilización, total o parcial, de los
contenidos de esta Web, en cualquier forma o modalidad, sin previa,
expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera
reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o
revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente
lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa. |