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• INDRA, ha presentado dos ERE que
afectarán a más de 1 280 personas en su división de
Defensa, sostenida principalmente por los contratos del
Gobierno y en MINSAIT que es la división de Consultoría
de Transformación Digital y Tecnologías de la
Información.
El mayor accionista de INDRA, es el Gobierno, a través
de la SEPI, con un 18,7% del accionariado total y los
resultados de INDRA publicado en la CNMV al cierre de
septiembre de 2020 no son, en absoluto, los de una
empresa con dificultades económicas. Principales
magnitudes presentadas son el crecimiento de la
contratación en un +11,4%, incremento de la cartera de
pedidos en un +17,6% consiguiendo un récord histórico
absoluto de 5 150 M€, consigue los 87 M€, hasta el
+4,1%, de margen operativo, la caja generada solo en el
tercer trimestre ha sido de +51 M€, la liquidez consigue
los 1.250 M€ entre efectivo y líneas de crédito y los
ingresos descienden un -2,7% respecto del mismo periodo
del año anterior. En la documentación de la ERE la
compañía reconoce que no tiene un problema de
viabilidad, es más bien de resultados.
En este sentido la compañía ha confeccionado 5
categorías de personas que se verán afectadas, sin
indicar quienes son los afectados. Sin embargo de la
documentación entregada (con medias de esos grupos) nos
preocupa lo que observamos en algunos de ellos:
El porcentaje de personas afectadas con reducción de
jornada son el doble que la que existe en la plantilla.
El porcentaje de mujeres afectadas es un 50% superior al
porcentaje de mujeres que existe en plantilla. Hay un
grupo que cuenta con una edad media de 54 años y el que
ellos denominan de baja empleabilidad y a los cuales dan
por rechazados tienen una edad mediana de 51 años.
Existe un grupo que denominan de desviación salarial,
formado por más de 300 personas, para las cuales no han
entregado ninguna información que permita comprobar esta
desviación y se han negado a hacerlo cuando se lo hemos
pedido.
Y sobretodo, lo más sangriento es que teniendo este país
a centenares de miles de trabajadores afectados por ERTE
con problemas de verdad, que son verdaderos dramas, para
los cuales el Gobierno está sacando recursos de donde no
hay, una empresa como INDRA con el espectacular
potencial de crecimiento en 2021 y con los amplísimos
recursos propios que posee, quiere endosar en el Estado,
el coste de más de 1 200 trabajadores enviándolos al
paro.
Estos ERE son la clara evidencia de como la reforma
laboral de 2012 recorta los derechos de las personas
trabajadoras en beneficio de empresas que, siendo
viables, quieren aprovechar los recursos del Estado para
mejorar sus resultados y repartirse los bonos y
variables entre los de siempre.
Es por eso que a instancia del 46% de la representación
de los trabajadores y trabajadoras representados por los
sindicatos ASIT, CGR, CIGA, CO.BAS, USO, ELA, RSTIC y
SIG INDRA se han presentado las siguientes cuestiones en
el Senado. |
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