• El CEMAS, el Centro Mundial para la
Alimentación Urbana Sostenible, organismo
interdisciplinar para la investigación, divulgación y
sensibilización de los grandes retos a los que se
enfrentan las ciudades y la población en general en
cuestiones alimentarias y nutricionales, ha sido el
objeto de la conferencia que el alcalde de València,
Joan Ribó, ha impartido en la sede de la Organización de
las Naciones Unidas de Nueva York.
Una conferencia que ha servido para presentar el CEMAS
ante la comunidad internacional como el centro de
referencia de la FAO en cuestiones de política
alimentaria urbana que operará desde España. El acto ha
sido presidido por la presidenta de la Asamblea General
de las Naciones Unidas, Ma Fernanda Espinosa, y por el
director general de la FAO, José Graziano da Silva.
El alcalde Joan Ribó ha presentado este centro de
referencia internacional con sede en València y radicado
en València, ante los delegados de los paises de la
Asamblea de la ONU, donde ha dado cuenta del trabajo que
este organismo va a desarrollar conjuntamente y en
colaboración con la FAO, «para facilitar políticas,
estrategias y acciones de las ciudades del mundo y sus
entornos periurbanos encaminadas a la lucha contra la
malnutrición y la desnutrición así como procurar
soluciones ante el desafío que supone el reto de
conseguir una alimentación sostenible y de calidad para
las generaciones presentes y futuras».
El alcalde ha explicado en su intervención que más la
mitad de la población mundial reside en áreas urbanas, y
que, según las previsiones, en el año 2050 lo harán dos
de cada tres habitantes; además, ha añadido, «las
ciudades se están convirtiendo en los grandes centros de
creación de riqueza y de desarrollo de iniciativas y
creatividad, pero también en el lugar donde se producen
más gases de efecto invernadero, mayores necesidades de
energía y de alimentos y la mayor producción de todo
tipo de residuos».
Por eso, ha explicado, «cada vez es más importante el
papel de las ciudades en la búsqueda de soluciones a los
grandes problemas que aquejan al ser humano como son,
por ejemplo, la insostenibilidad del sistema económico
actual, el cambio climático, el hambre y la nutrición
inadecuada de amplias capas de población». «Estos
problemas, al igual que otros, como los movimientos
migratorios que se realizan en condiciones vergonzantes
y parecen irresolubles a niveles de política nacional o
internacional, encuentran vías de solución a escala
municipal o de ciudad», ha sentenciado, tras aseguar que
las administraciones locales y la ciudadanía en general
«tenemos mucho que decir y muchas soluciones que
aportar».
En este contexto, ha continuado el alcalde de València,
«y con el objetivo de participar en la resolución de los
grandes problemas de la historia que nos ha tocado
vivir, que son demasiado importantes para dejarlos solo
en mano de los estados y las entidades supranacionales,
se han desarrollado muchas iniciativas a escala local,
que compartimos con urbes de todo el planeta, tal y como
se plasma en el Pacto de Política Alimentaria Urbana de
Milán que firmamos el 15 de octubre de 2015 más de cien
ciudades».
«El objetivo de este acuerdo era desarrollar sistemas
alimentarios que sean sostenibles, inclusivos,
resilientes, seguros y diversificados, para asegurar
comida sana y accesible a todas las personas, con el fin
de reducir los desperdicios de alimentos, preservar la
biodiversidad y adaptarse y mitigar los efectos del
cambio climático», ha recordado Joan Ribó.
«Y en coherencia con este pacto -ha destacado el alcalde
de la capital del Túria- València, ubicada en un enclave
privilegiado para la producción de alimentos, con una
huerta periurbana que es una de la mayores y más
productivas del mundo, y en un momento de cambio
político en el Ayuntamiento, vive inmersa en un proceso
de transformación agraria y alimentaria con el objetivo
de poner fin al proceso de destrucción y degradación de
la huerta, con iniciativas de producción sostenible de
alimentos, mayoritariamente de carácter ecológico, y su
posterior distribución y comercialización en la ciudad
mediante mecanismos de mercados locales, kilómetro cero,
mercados de productores, producción ecológica, etc.»
El alcalde ha explicado «el progreso de la política
alimentaria de València para garantizar simultáneamente
la salud y la calidad, además, evidentemente, de
erradicar la pobreza de la ciudad y, al mismo tiempo,
reducir de forma drástica la emisión de gases de efecto
invernadero en la producción y la distribución de
alimentos, tal como posibilita la agricultura urbana y
ecológica cuando se distribuye en proximidad».
Entre las acciones de esta política, Joan Ribó ha
resaltado algunos ejemplos, como la introducción de la
dieta mediterránea con productos ecológicos y de
proximidad en los colegios «para educar en la
alimentación sana a los más jóvenes y, paralelamente,
potenciar la demanda de productos y verduras ecológicas
que favorezcan y ayuden a desarrollar la introducción de
prácticas más ecológicas y sostenibles en la huerta de
València y su área metropolitana, que, por otra parte,
mitiguen las primeras consecuencias del cambio
climático».
Además, según ha argumentado Ribó, en el marco de esta
política, el Ayuntamiento de València ha firmado
alianzas para la prevención del cambio para reducir las
emisiones de gases de efecto invernadero un 40% en 2030
y, recientemente, un acuerdo con la FAO para promover
vías de producción y distribución sostenible de
alimentos que garanticen la salud y la calidad
alimentaria. Asimismo, ha continuado, el Ayuntamiento de
València «trabaja para contribuir, en la medida de sus
posibilidades, al cumplimiento de la Agenda 2030 para el
Desarrollo Sostenible, aprobada por la Asamblea General
de las Naciones Unidas el pasado 25 de septiembre de
2015 para caminar hacia modelos de desarrollo
incluyentes y sostenibles a nivel local encaminados a
eliminar el hambre en el mundo mediante la producción de
suficientes alimentos seguros y nutritivos y la
generación de mecanismos de distribución que permitan el
acceso a toda la población de forma sostenible».
VALÈNCIA, CAPITAL MUNDIAL DE LA ALIMENTACIÓN
SOSTENIBLE
Para terminar, el alcalde ha explicado «que a raíz de
esta voluntad y trabajo» València fue elegida Capital
Mundial de la Alimentación Sostenible 2017, y ha
recordado actividades llevadas a cabo durante aquel año,
en el que se organizó, por ejemplo, la Cumbre de
Alcaldes de las Ciudades Firmantes del Pacto de Milán.
«Este encuentro supuso un importante avance para
conseguir en todas las grandes ciudades una alimentación
más saludable, inclusiva y sostenible como certifica la
Declaración de València, un documento consensuado por
los más de ciento sesenta alcaldes y representantes
municipales de todo el mundo reunidos en València y con
la presencia de José Graziano da Silva, director general
de la FAO».
Seguidamente, el Ayuntamiento de València acordó en
otoño de 2018 la creación del CEMAS, cuyo Consejo Rector
se constituyó el pasado 14 de febrero y que, tal como ha
reiterado el alcalde, trabajará en colaboración con la
FAO como una institución facilitadora de información,
conocimiento y conexión a nivel mundial con otras
entidades de Naciones Unidas y entidades públicas y
privadas, fundaciones y centros de investigación «para
conseguir sistemas alimentarios locales sostenibles en
un marco de derechos y dignidad para todas las
personas». |
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